EL MUNDO
7 febrero 2011
Todo por una sonrisa
'de cine'
Patricia Matey
Los expertos advierten de los riesgos del mal uso de blanqueantes. Los dentífricos y chicles blanqueantes
no son eficaces.
Se
mire a donde se mire, ahí están ellos relucientes y blancos. Son los dientes de
famosos, artistas, modelos... que están despertando envidias entre los
ciudadanos de a pie. Pero los mortales están decididos a tener también sonrisas
de cine y se están lanzando al consumo de remedios caseros (pastas dentífricas,
geles para aplicar en férulas y tiras o películas
blanqueadoras) con el fin de dejar sus dientes níveos. Otros prefieren pasar
directamente por la consulta del dentista.
De
hecho, la demanda de tratamientos blanqueadores ha aumentado tanto que incluso,
en 2008, Linda Greenwall, odontóloga y autora de
distintos libros sobre las técnicas que aclaran los dientes, fundó
Las
voces de alarma no han tardado en dispararse entre los especialistas. Porque,
tanto el mal uso casero, como el abuso (la blancorexia
define a las personas obsesionadas con el blanco de los dientes que se someten
reiteradamente a tratamientos) de las sustancias blanqueadoras erosionan la
superficie de las piezas dentales y pueden acarrear problemas de salud. Las
utilizadas: peróxido de carbamida o de hidrógeno.
El
odontólogo de Madrid Juan Ramón De Córdoba, aclara que "lo primero que los
pacientes deben tener en cuenta es que no se puede hablar de blanqueamiento,
porque los tratamientos no tienen este efecto, sino que aclaran los dientes. El
éxito depende en gran medida del buen diagnóstico del agente o agentes
causantes de la tinción dentaria, que pueden ser de carácter exógeno o
endógeno".
A
sus argumentos se suma el Consejo General de Dentistas de España (CGCOE) que
defiende la necesidad de ponerse en manos de un dentista antes de someterse a
este tipo de técnicas. "Se debe hacer una valoración del estado general de
la salud bucodental del paciente, no sólo para
decidir el tratamiento más adecuado en cada caso, sino para descartar otros
problemas y evitar así posibles complicaciones. Esta revisión es de vital
importancia, ya que el blanqueamiento no está recomendado pacientes con
gingivitis u otras enfermedades periodontales",
reconoce el CGCOE.
Los riesgos
Recuerda,
además, que "los tratamientos que actualmente se venden y usan libremente
en cualquier tipo de comercio y centros de estética, pueden contener
concentraciones de agentes blanqueantes (entre el
0,1% y el 6% de peróxido de hidrógeno) que pueden ocasionar problemas bucodentales".
Los
más frecuentes "son las quemaduras en tejidos blandos y un aumento de
sensibilidad exagerada en los dientes. Una cuestión importante del tratamiento,
que suele preocupar al paciente, es el tiempo de duración de los resultados del
blanqueamiento dental. Los dientes están sometidos a agentes externos
constantemente, por tanto, a tinciones. Esto significa que los tratamientos no
son definitivos", reconoce el doctor De Córdoba.
Y
para que nadie se lleve a engaños, el CGCOE advierte que "los dentífricos
y chicles para blanquear tienen tan bajas concentraciones de peróxidos que su
eficacia como tratamiento para aclarar los dientes es nula".